Brókers, miedo a perder y promociones mal hechas

Oh, bróker, vuelvo a escuchar tu seductor canto de sirena y hoy más que nunca soy susceptible a tu llamada cegadora.

Esta semana he tenido que volver a rechazar un acuerdo de promoción con una empresa de inversiones. Nada chungo. Un bróker regulado por la CNMV, con buenas reseñas; tengo amigos que lo utilizan. Hasta yo tengo una cuenta en él (sin darle uso, por ahora).

Pero he tenido que rechazarlo. Promocionar un bróker de este tipo sería como animar a mi público –gente joven y de interés general– a hacer trading con CFDs. No puedo hacer eso. El 80% de las cuentas minoristas pierden dinero en la negociación con CFDs con este proveedor. Cada cuál con su responsabilidad… Sí, pero hay que tener un poco de ética en lo que promocionamos. Tampoco es plan echar a tus seguidores a los leones.

Y sin embargo esta vez ha sido más difícil que todas las veces anteriores. En los últimos meses mi canal ha tenido mucho crecimiento, buenos números y buenos resultados. Pero todo lo bueno se acaba. Paradójicamente, cuando me iba peor, ni siquiera me molestaba en abrir los correos de exchanges, brokers y proyectos de criptomonedas. Me daba igual, el “no” era automático. Quiero ganar dinero y hay ambición en mí, pero de chill.

Y ahora que mis números han mejorado ya no me da “tan” igual. Creo que lo que me está pasando es que la ambición no pesa tanto como el miedo a perder. Miedo a ganar menos. Joder, eso sí que pesa. Creo que esa puede ser la clave por la que la gente se corrompe. 

Por eso vemos youtubers que, al morirse lentamente, resurgen como influencers de criptomonedas. Sí, me refiero al trío de piscineros que ahora resulta que son unos cracks de las inversiones blockhain. Como dijo Braveheart: podrán quitarnos las visitas, pero jamás nos quitarán el dinero. Igual no fue del todo así. Pero hoy lo es. Menos visitas, sí, pero si por cada vídeo promocionas un juego nft, un proyecto, un exchange o tienes enlace de afiliado, seguro que compensa.

Que conste que mi crítica no es a la promoción de servicios financieros. Mi crítica es que hay formas y formas de hacerlo. No es lo mismo que youtubers como El psicólogo del trading o Capelo promocionen un broker y pongan su enlace en la descripción, con coherencia y para una audiencia que ya sabe dónde se mete; a, por ejemplo, lo que hace este chaval de 17 años.

Se llama Dollar Dorado y su canal está siendo todo un éxito. Su secreto: vender el sueño americano –yo hoy lo llamo el sueño de internet– a otros adolescentes como él. En su último vídeo nos comenta un poco su analíticas demográficas. Entre otras cosas vemos que su audiencia tiene en un 50% entre 14 y 18 años (si eso es lo que le dicen las estadísticas de youtube, digamos que son más).

La cuestión es que el vídeo está patrocinado por Nexo.io, un exchange de criptomonedas que, la verdad, no lo había oído nunca pero según Dollar Dorado destaca “por su seguridad”.

Vamos a pensar un momento. Esta empresa de inversión en criptomonedas ha contactado con un youtuber de 17 años. Le han pedido estadísticas demográficas (siempre se hace esto en una promoción), han visto que la audiencia es mayoritariamente menor de edad y han dicho: okey, es lo que buscamos. 

¿No es un poco un sinsentido? Que no me saquen el meme de Los Simpson de “¡es que nadie piensa en los niños!”, que estoy a favor de que se hable de finanzas a los menores de edad. De que se eduquen, al menos. Pero, vamos, dudo mucho que esta empresa, Nexo, tenga el interés de educar a ningún joven. Lo que quieren es su dinero. La promoción consiste en que si metes 100 euros te regalan 25. Ponte a tradear con 100 euros. Es un cachondeo. 

Mi opinión es que es una promoción mal hecha. Y me pregunto: ¿si haces esto cuando estás en fase de ambición, qué estarás dispuesto a hacer cuando estés en el miedo a perder?